Cultural / Arte

Diseñar y ensamblar a mano un reloj de lujo totalmente personalizado, experimentando el mimo puesto en estas piezas, en un taller relojero de Ginebra.

Comprender la merecida fama de la relojería suiza de la mano de Audemars Piguet, la firma más antigua del país, en Vallée de Joux. Visitar su museo y talleres para ver el minucioso trabajo que esconde cada una de estas obras de arte montadas a mano.

Descubrir todas las facetas de Vietnam recorriendo sus parajes más icónicos: pasear en bicicleta por los arrozales infinitos de Mai Chau, perderse en las callejuelas de Hoi An en sidecar o subirse a una vespa y dejarse llevar por la energía de la vibrante Saigón

Explorar la inigualable Katmandú a través del objetivo de una cámara y junto a un fotógrafo profesional. Recorrer sus callejuelas, plazas y templos mientras se busca la instantánea perfecta y se juega con las luces, reflejos, texturas y detalles de la ciudad.

Darse un baño de luz con las primeras luces del amanecer y respirar profundamente antes de empezar el día con una clase privada de yoga. Fluir con los movimientos de este arte milenario frente al icónico palacio del Taj Mahal, siguiendo las enseñanzas de un auténtico maestro y conectando con este exclusivo entorno a un nivel profundo y espiritual.

Colarse en la sala del tesoro del Banco de Mongolia y dejarse deslumbrar por las valiosas piezas decorativas de oro que allí se guardan: aparejos de caballos ricamente labrados que se remontan a tiempos de los hunos. Contemplar la colección de monedas y sellos reales del siglo XIII, acuñados por el gran conquistador Gengis Khan.

Disfrutar de una visita en privado, tras la hora de cierre, a las salas y galerías del Museo Nacional de Antropología e Historia de Ciudad de México. Conocer uno de los museos más importantes del mundo a través de su completísima colección de arte precolombino, la más grande del planeta.

Desentrañar el legado cultural más valioso de la capital checa en una visita privada al Clementinum, antigua universidad y actual hogar de la Biblioteca Nacional, junto a su director; teniendo la oportunidad de recorrer los infinitos estantes de libros, perderse en sus historias, admirar las vistas panorámicas de la ciudad desde su torre y maravillarse con la sala del meridiano.

Experimentar la esencia de la elegancia parisina a bordo de un lujoso y exclusivo crucero por una de las avenidas fluviales más bellas del mundo, el Sena. A lo largo de este recorrido privado, tendremos la oportunidad de descubrir los monumentos más icónicos de la ciudad, como la Torre Eiffel, Notre-Dame, el Museo del Louvre o el Museo D’Orsay, desde una perspectiva única, mientras disfrutamos de la privacidad y la comodidad de una auténtica limusina veneciana de agua.

Perderse dentro del tesoro artístico que es la Ópera Garnier y descubrir, acompañados por un guía privado, su sorprendente riqueza arquitectónica, sus silenciosos pasillos y su abundante decoración. Partiendo del majestuoso Grand Ecalier, exploraremos a nuestro paso el auditorio, los salones y los vestíbulos, normalmente, cerrados al público. 

Adentrarse, en exclusiva, en el nuevo Gran Museo Egipcio, aún en construcción, y admirar el que será el mayor museo arqueológico del mundo, que albergará más de 50 000 obras del Antiguo Egipto.

Acceder a las excavaciones más recientes en torno a las pirámides, en privado y acompañados por el prestigioso doctor Mark Lehner, para conocer los últimos detalles que se conocen de estas maravillas arquitectónicas, sus constructores y los faraones que las concibieron.

Admirar las pirámides de Giza antes de su horario de apertura al público, adentrarse en las patas de la Gran Esfinge o explorar en privado la tumba Wahtye en Saqqara, un exclusivo hallazgo arqueológico. Dejarse sorprender con las tumbas de Nefertari o Seti I, dos obras maestras del arte egipcio

Admirar las peculiares iglesias fortificadas de Transilvania, declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, conociendo estos monumentos únicos en el mundo antes de surcar los cielos sobre los Cárpatos.

Explorar, fuera del horario de apertura, el impresionante castillo de Bran y poder recorrer libremente las galerías y estancias que inspiraron una de las novelas más famosas del siglo XIX, Drácula. Degustar una cena tradicional en el elegante Salón de la Música de la Reina María.

Aventurarse en el laberíntico sistema de túneles y cuevas utilizado como escondite para navíos durante la IIª Guerra Mundial o bucear por el fondo marino del estrecho de Kumbor y la cueva de Klinci, famosos por su abundante fauna marina.

Sentirse parte de la cultura montenegrina y caminar por su historia mientras se recorre la bahía de Boka y las ciudades de Kotor y Perast, maravillas medievales intactas. Revelar los secretos de sus edificios monumentales, incluido un palacio patrimonio de la UNESCO al que acceder en privado.

Ahondar en las tradiciones judías y su historia con el rabino ejecutivo de la EMIH Asociación de Congregaciones de Judíos de Hungría. Recrearse en los detalles neorrenacentistas de la Ópera Estatal de Budapest antes de asistir a un concierto privado o dejar que las teclas de marfil canten su melodía en la Casa Memorial de Béla Bartók.

Contemplar la biblioteca más antigua del este europeo en el monasterio de Strahov en Praga, conocer sus secretos a solasy vivir un concierto privado de violín en la misma sala donde el gran Mozart compuso algunas de sus obras.

Sobrevolar las llanuras rojizas de AlUla, flotando sobre las formaciones rocosas que enmarcan la antigua Ruta del Incienso y admirar la sorprendente belleza natural de Elephant Rock y descubrir Hegra, la pequeña Petra saudí.

Dibujar el skyline de Riad desde la planta 99 del Sky Bridge, uno de los rascacielos más emblemáticos de la capital saudita. Ver cómo la cosmopolita ciudad da paso a un desierto abierto e inabarcable, que se funde bajo las últimas luces del día.

Sentirse parte del fascinante legado de las culturas polinesias en el valle de Papenoo, donde un guía experto dará vida a las leyendas y tesoros de Tahití mientras se explora su naturaleza en 4×4.

Ser los reyes del único castillo de toda Oceanía, Larnach Castle, en compañía de su actual propietaria. Hacer que las manecillas del tiempo giren en sentido contrario y revivir las historias que tuvieron lugar en las estancias y jardines de la fortaleza.

Dejar que los gustos personales de cada quien guíen esta experiencia y conocer a un reconocido artista neozelandés. Charlar y aprender al mismo tiempo en una inmersiva visita al mundo de la pintura, la escultura o la fotografía, entre otras disciplinas.