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Arabia Saudita se presenta ante el mundo como un destino de contrastes sublimes, donde el tiempo parece detenerse entre el misterio del desierto y la pureza del mar.
Un territorio que abre sus puertas con discreción, resguardando paisajes inexplorados, una hospitalidad ancestral y la promesa de una experiencia transformadora.
Las costas inmaculadas del Mar Rojo saudí albergan santuarios privados donde la naturaleza y la arquitectura dialogan en perfecta armonía. Espacios concebidos para quienes buscan más que aun destino: una conexión genuina con el entorno, la exclusividad en su forma más serena y la sostenibilidad como compromiso inquebrantable.
Destinos en el Mar Rojo saudí:
Donde lo inexplorado se encuentra con lo extraordinario
En un rincón del Mar Rojo saudí donde la naturaleza sigue dictando el ritmo, Nujuma, a Ritz-Carlton Reserve emerge como un refugio diseñado para los verdaderos exploradores del mundo. Inspirado en los antiguos navegantes que surcaron estas aguas, este santuario invita a descubrir un entorno donde el lujo es la tranquilidad y, la exclusividad, la inmersión en lo auténtico.
Las experiencias en Nujuma se moldean con el paisaje: inmersiones en arrecifes prístinos, caminatas entre manglares y rituales ancestrales en Neyrah Spa, donde el mar y la tierra inspiran cada tratamiento. Sus villas con acceso directo al océano, han sido concebidas para integrarse con el entorno, ofreciendo una privacidad absoluta. Al caer la noche, el cielo se convierte en un espectáculo infinito, contemplado desde los telescopios privados de cada estancia.
Nujuma es, además, un modelo de sostenibilidad. Su infraestructura opera con energía solar y su compromiso con la conservación se traduce en iniciativas como la reforestación de manglares y la protección de las tortugas marinas. Cada estancia aquí es una invitación a formar parte de un turismo más consciente y respetuoso con su entorno.
Ummahat: La esencia de la hospitalidad en una isla privada
En el corazón del archipiélago de Ummahat, The St. Regis Red Sea Resort reinterpreta el arte de la hospitalidad árabe con una elegancia atemporal. Un enclave donde la naturaleza es protagonista y el tiempo fluye con otro ritmo, entre la inmensidad del mar y la calidez del servicio impecable.
Las villas, diseñadas para integrarse con el paisaje marino, ofrecen un retiro de absoluta privacidad, mientras que la experiencia gastronómica se convierte en un viaje sensorial, con ingredientes autóctonos y creaciones que exaltan la riqueza del mar. Desde travesías en yate hasta cenas bajo un cielo estrellado, cada instante en The St. Regis Red Sea Resort está pensado para ser inolvidable.
Un equilibrio sutil entre sofisticación y sostenibilidad, donde cada elemento ha sido concebido para preservar la belleza natural de Ummahat.
Thuwal Island: Una inmersión en lo inexplorado
Para quienes buscan el máximo nivel de privacidad, Thuwal Private Retreat ofrece una experiencia que trasciende la hospitalidad convencional. Más que un alojamiento, es un santuario diseñado para desconectar del mundo sin renunciar al más alto nivel de servicio.
Ubicado en una isla remota, este retiro permite explorar el ecosistema del Mar Rojo saudí con actividades a medida: inmersiones en arrecifes vírgenes, travesías en kayak por aguas cristalinas y experiencias gastronómicas creadas por chefs de renombre, todo en absoluta intimidad.
El compromiso con la sostenibilidad es parte esencial de Thuwal. Desde el uso de ingredientes locales en su gastronomía hasta la integración de prácticas responsables que respetan la biodiversidad del entorno, cada detalle ha sido cuidadosamente pensado para minimizar el impacto y maximizar la autenticidad de la experiencia.
Un destino donde la naturaleza y la sostenibilidad convergen
Las islas privadas del Mar Rojo saudí representan una nueva forma de viajar a Arabia Saudita: un equilibrio entre exclusividad, respeto por el entorno y autenticidad.
Desde Nujuma y su compromiso con la conservación, hasta The St. Regis Red Sea Resort y su reinterpretación de la hospitalidad, cada enclave redefine el significado del descanso y la exploración.
Aquí, el tiempo se ralentiza, la naturaleza dicta el compás y la experiencia se convierte en un recuerdo imborrable.
